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domingo, 10 de mayo de 2015

Id y enseñad: 50 años educando

" Todo empezó en Galilea....." ( Hch 10,37)

        Y así podría recogerse la historia de una comunidad educativa que lleva 50m años enseñando en Avilés.
        El día 26 de Abril tuve el privilegio de ser invitada a un acto conmemorativo por el 50 Aniversario del Colegio Nuestra Señora del Buen Consejo de Avilés. Doy las gracias a las madres agustinas por ello y a toda su comunidad educativa.
       Todos los que hemos sido llamados a la vocación de "maestro" sabemos lo que es levantarse cada día desde el "id y enseñad". Precioso lema y dura misión, sobre todo en estos tiempos donde un maestro es lo más parecido a un gladiador que ha de luchar y sobrevivir día a día en la arena del circo.
       Las madres agustinas y toda la comunidad educativa nos han hecho sentir en la celebración del 50 aniversario el cuidado de su bien hacer en nuestras tierras avilesinas. Antiguos alumnos, profesores, amigos y todos los que estábamos allí, sentimos el calado de su obra. La acogida, la cercanía, el cariño, la entrega, la preferencia por los más pobres, necesitados y sencillos.....notas de una melodía que sonaba entre el ambiente. A la vez que se agolpaban los recuerdos las fotografías iban haciendo historia de muchos momentos vividos de fuerte emoción.
       Hoy me llena de alegría y satisfacción el haber podido compartir retazos de esa historia con esa comunidad que vive con fe, sencillez y gozo ese "id y enseñad". Que hace que cada día el maestro se sienta orgulloso de su misión en el mundo .
      Gracias a toda la comunidad agustina y a toda la comunidad educativa por vuestra labor .

viernes, 31 de octubre de 2008

Memoria agradecida.

"Educar a un niño no es hacerle aprender algo que no sabía , sino hacer de él alguien que no existía"

(John Ruskin)


Me encantó la frase cuando la leí, la descubrí leyendo frases en un magazine. Me hizo pensar - ya sabéis - en "mis pequeños duendes". Sentí el vértigo de la responsabilidad . Y a la vez el reto de poder conseguirlo. ¿Por qué no puede ser posible?.Recordé entonces mi infancia. Y con ello aquellas personas, aquellos educadores que han hecho de mí "una existencia" de vida. A ellas quiero dedicar como homenaje en "Memoria agradecida" este sencillo texto que intenta ser reflejo de lo que existe en mi corazón.

Hace unos días tuve el honor de ser invitada a la celebración del 50 aniversario del Colegio Paula Frassinetti -congregación de las Hermanas Doroteas-, del que yo soy antigua alumna ( !...y de las antiguas, comencé en el año 67...!) .

Desde el día que Dora, la directora, me lo comunicó estuve esperando el acontecimiento con ilusión y emoción. Sería una manera de volver a vivir aquellos momentos de mi infancia y adolescencia. Llegado el día, puedo deciros que asistí llena de alegría. Iba dispuesta a empaparme de todo y disfrutar de cada detalle y cada minuto. Comenzó la celebración con la Eucaristía. El sólo hecho de ver a todo el colegio allí, participando y celebrando con sencillez, humildad y alegría , me llenó de gozo. Pasaron ante mí muchos recuerdos . Recuerdos de mis compañeras, que algunas no las he vuelto a ver, pero no las he olvidado , aún están en mi corazón. El recuerdo de aquella profe que me hizo amar la lectura y aún vivo "enganchada" a los libros. Los pasillos brillantes, el olor en el laboratorio de ciencias, el uniforme con el cuello duro, luego la falda de cuadros ....como había cambiado todo y a la vez nada. Se respiraba el mismo ambiente.Fue como un sueño real y ahora más consciente. Pude ver la sencillez del trabajo realizado - IN SIMPLICITATE LABORO- ése es el lema que está grabado en el escudo. Y se vio reflejado en el acto. Una eucaristía, sencilla , elaborada, participativa y organizada. Me sentí como en casa , ese sentimiento de estar a gusto, acogida, de pertenecer a una familia.
Por ello no puedo menos que sentirme agradecida y expresar mi gratitud a mis primeras y únicas educadoras, que consiguieron hacer de mi "alguien que no existía". Gracias por la entrega y el cariño que habéis depositado en mí. Gracias por ayudarme a ser mejor persona , mejor mujer y mejor creyente. Gracias por seguir trabajando con sencillez y darnos la oportunidad de poder celebrar con vosotras estos cincuenta años educando,sembrando el mundo de mujeres y hombres que son alguien. A mi me habéis recordado el reto que tengo como educadora ante "mis pequeños duendes". Podemos celebrar con orgullo que el estilo educativo de nuestra "Santa Paula" aún sigue teniendo sentido y es actual, aún sigue educando para ser ALGUIEN.
GRACIAS POR VUESTRA LABOR.